¿Cómo hablar con fluidez?

Si has llegado hasta este artículo es porque, por supuesto, eres conocedor del español, por lo menos para entender lo que aquí está escrito. Y estoy segura de que si no es ahora mientras lees, alguna vez, a lo largo de toda tu experiencia en el aprendizaje de la lengua española te has dicho a ti mismo:

“¿estaré diciendo bien lo que quiero decir?, espera … voy a pensar mejor cómo lo digo”.

Es normal, a todos los que hemos aprendido una lengua nueva, similar o diferente a nuestra lengua nativa nos ha pasado alguna vez. En mi caso, mi lengua nativa es el español y, desde pequeña he estudiado la lengua inglesa pero no la utilizaba muy a menudo en mi país. Además, al igual que os habrá ocurrido a muchos de los que leéis este artículo; hará como unos seis años que se me ocurrió la brillante idea de estudiar otra lengua, en mi caso: chino mandarín.

Durante todos los años que estudiaba inglés, como os he comentado anteriormente, lo utilizaba de una manera muy básica y sistemática; ya que lo practicaba solo en las clases en las que lo aprendía. Esto también me ocurría con el chino, a parte de que cuando lo empecé a estudiar, me pareció casi imposible, ese primer año que tuve contacto con el idioma, solo lo ponía en práctica con mi profesora en el aula. Es curioso como, no solo cuando estaba estudiando estos idiomas, si no cuando ya poseía un nivel suficiente como para entablar una conversación; cada vez que tenía que ponerlo en práctica, bien fuera respondiendo a mi profesora o realizando alguna actividad de tipo oral, necesitaba unos minutos para pensar lo que iba a contestar, o para pensar que palabras o expresiones debía usar correctamente en el tema que iba a tratar. Al final, siempre me hacía la misma pregunta, ¿cómo hablar con fluidez?

Mientras yo seguía pensando, reflexionando y volviendo a pensar cómo contestar de forma correcta y de manera clara para que mis profesores de ambas lenguas me entendiesen; podía escuchar o incluso observar a diario el mensaje:

“Estudia con nosotros y serás bilingüe en inglés”.

Este mensaje, estoy convencida de que todos o sino más de la mitad de los que leéis este artículo, lo habréis reconocido en alguna ocasión, bien en academias, en páginas de Internet para aprender idiomas, etc.  Pero incluso, lo seguiréis viendo y no solo a través de estos medios, si no que en la propia sociedad (incluida la española), el simple hecho de que para poder expresarte correctamente en una situación hablada, tengas que dedicar unos minutos a pensar, puede llegar a estar mal visto. Y no solo eso, sino que puede causarte cierta frustración, obviamente no a todos en la misma medida. Pero sí que puedes preguntarte de alguna manera, que con todo el tiempo que llevas estudiando, por qué no eres capaz de responder más rápido o incluso, responder como lo harías en tu propia lengua. Pues, desde mi propia experiencia te digo a ti, lector, ¡no te agobies, no es para tanto y tiene solución!

Quizás esta solución ya la tengas en tus manos o la tengas muy pronto, ¿cómo? Pues tan simple como si viajas al país de la lengua que has aprendido o estás aprendiendo. Me refiero a eso que llaman inmersión lingüística, sí funciona, lo he vivido y me ha ayudado a encontrar la respuesta a la pregunta que nos hacemos todos los que queremos aprender un idioma nuevo: ¿cómo hablar con fluidez?.

En próximos artículos os voy a contar cómo ha sido mi experiencia inmersiva en la Universidad de SISU en Shanghái.

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